HIFU (Ultrasonido Focalizado de Alta Intensidad) es un tratamiento no invasivo que utiliza ondas de ultrasonido para estimular la producción de colágeno y elastina en las capas más profundas de la piel. Es ideal para rejuvenecer el rostro y cuello, reafirmando la piel y reduciendo la flacidez sin cirugía ni tiempo de recuperación.
El HIFU es una tecnología avanzada que utiliza ultrasonido focalizado para tratar las capas profundas de la piel, estimulando la producción de colágeno. Este tratamiento es ideal para pacientes con flacidez leve a moderada en el rostro, cuello y cuerpo, buscando un efecto lifting sin necesidad de cirugía.
A diferencia de otros tratamientos estéticos, el HIFU trabaja a mayor profundidad sin dañar la superficie de la piel, proporcionando un resultado más duradero y natural. Su capacidad para tratar las capas más profundas lo convierte en una opción efectiva para tensar y rejuvenecer la piel.
El HIFU se puede aplicar en las siguientes zonas del rostro y cuello:
Óvalo facial: Mejora la firmeza y contorno del rostro.
Cuello: Reduce la flacidez y mejora la tonicidad.
Abdomen: Ayuda a reducir la grasa localizada y mejora el contorno.
Muslos y flancos: Reduce la grasa localizada y mejora la apariencia de la piel.
Los resultados comienzan a ser visibles entre 2 y 3 semanas, con mejoras progresivas durante los siguientes 2 a 3 meses. Los efectos del tratamiento pueden durar entre 12 y 18 meses, dependiendo del tipo de piel y el cuidado posterior.
Los efectos secundarios son mínimos. Algunos pacientes pueden experimentar enrojecimiento leve o hinchazón temporal, que desaparecen en pocas horas después del tratamiento. El procedimiento es indoloro, y no requiere tiempo de recuperación.